5 cambios para empezar este #JulioSinPlástico

Como ya sabemos, Julio Sin Plástico es una campaña que nos invita a repensar nuestra relación con el plástico. Julio es el mes en el que nos desafiamos a eliminar algún plástico descartable en particular. 

Lo primero que tenemos que hacer es como si fuera un diagnóstico y ver cuál es ese plástico evitable que queremos sacar de mi rutina. Este año, Unplastify sugiere 10 plásticos: botellas descartables, bolsas de plástico, bandejas de delivery, vasos de café, cubiertos descartables, cepillos de dientes, envase de shampoo o acondicionador, film autoadherente, esponja o envoltorios de alimentos. Proponemos elegir uno solo para que la tarea se vuelva un hábito más fácil, después vas a poder hacer lo mismo con los plásticos que quieras. 

Desde MERAKI te traemos 5 plásticos para empezar a eliminar durante este desafío:

1. Cepillo de Dientes de plástico
2. Pasta de dientes en tubo de plástico
3. Hilo Dental de plástico
4. Hisopos de plástico
5. Botellas de agua descartables

Los cepillos de dientes de plástico se pueden reemplazar por un cepillo de dientes de bambú, que es 97% biodegradable y 3% reciclable. El mango se puede compostar y las cerdas las podés dejar en el tacho verde (son de nylon, un plástico reciclable), o en una botella de amor. 

Los tubos de pasta de dientes suelen estar compuestos por distintos materiales, lo que imposibilita su reciclaje. Además, históricamente sólo el 9% del plástico se recicló. Los tubos plásticos pueden ser reemplazados por una alternativa que viene en envase de vidrio, recargable con un sobre compostable, Bits MERAKI, un dentífrico sólido en comprimidos.

El hilo dental es un filamento que suele ser de teflón o polipropileno, un tipo de plástico que complejiza mucho su reciclaje por su tamaño. En su lugar podés utilizar Hilo dental de origen vegetal, que cumple la misma función que el de plástico, pero es biodegradable. Viene en envase de vidrio o bambú, y podés recargarlo infinitas veces.

Las botellas de plástico descartables son un gran problema, ya que están fabricadas de PET, que puede durar hasta 500 años sin descomponerse pero generalmente se utilizan una sola vez y luego son desechadas. En su lugar, podés utilizar una botella reutilizable. Llevala a todos lados y recargala todas las veces que quieras.

Y a vos… ¿Qué cambios te quedan por hacer?